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martes, 15 de noviembre de 2011

Rudolf Otto: Pautas para lectura de "Lo Santo"

"Hay que raer del conocimiento la democracia del saber, según la cual solo existiría lo que todo el mundo puede conocer".
Ortega y Gasset
 

-La circunstancias históricas-
 

La tesis de Otto consistía en rescatar la categoría de lo santo (das Heilige, relacionado con das Heile, lo santo, saludable y salvífico). Su pretensión era que esta categoría se convirtiera en una categoría autónoma, mas allá de la esfera de lo ético y lo racional.
Otto acude al término numinoso. Éste es por un lado, mysterium tremendum, lo totalmente diferente, algo que aterra y por otro es a la vez atrayente, fascinante. 

Es el autentico fondo de todas las religiones (el objeto de la reflexión fenomenológica heideggeriana).
La religión para Otto brota de la experiencia, de la vivencia. Es un hecho objetivo. No todo se reduce a percibir el eco de la propia voz en un vacio insondable.
 


 
La teología protestante, en aquellos momentos, se declinaba por la teología liberal. Su máximo representante fue Harnack. Éste rechazó la posibilidad de que la teología se abriese al estudio científico de las religiones no cristianas.
Los teólogos liberales se centraron en mostrar el carácter absoluto del cristianismo.  Con su tendencia a la reconciliación, temían que el carácter escatológico convirtiese el cristianismo (que debia ser
algo asequible, practicable y racional) en algo extraño a la cultura imperante.
 

La teología dialéctica toma el relevo a la liberal. Su máximo representante es Barth, que sí tenia oidos para “lo totalmente otro”. Sabía que un cristianismo que no sea totalmente escatológico no merece llamarse cristianismo.
Barth compartía el rechazo liberal hacia las religiones no cristianas. Aceptó el veredicto de Feuerbach (uno de los atacantes mas decisivos a la religión,dándole significado de necesidad, indigencia y precariedad) sobre la religión como proyección.

Este veredicto no afectaba al cristianismo, que no es religión, es fe. Entiende por religión, el esfuerzo humano para acceder a Dios. El cristianismo nos ahorra este esfuerzo, ya que en él es Dios quien toma la iniciativa y se nos hace cercano. El camino para conocerle no pasa por la reflexión, sino por la obediencia. La palabra del Dios cristiano es el juicio negativo sobre las demás religiones.
 

Otto contribuyó a poner fin al descrédito sufrido por el concepto de religión durante el SXIX. A su muerte, en 1937, se abre camino al convencimiento de que la religión forma parte de la cultura de los pueblos.
 

-Perfiles biográficos-
 
Otto nace en 1869. Su educación religiosa fue rigorista. Al comenzar sus estudios en Erlangen su finalidad era adquirir el conocimiento suficiente para defender la ortodoxia. Varios profesores influyeron en su pensamiento, entre ellos Von Frank, que le contagió su subjetivismo que ya nunca abandonará y le hizo desconfiar de la fundamentación biblicista de la teología.Contra el dogmatismo propone el estudio de la historia, la crítica histórica a los textos bíblicos.
 

De A. Ritschl, figura crucial de la teología liberal, defendió una orientación emotiva-subjetiva en sus investigaciones sobre el pietismo. El pietismo será la explosión de la individualidad largamente sofocada por la rigidez de la ortodoxia protestante.
 

Otto fue un gran amante del arte y la música. Le apasionaba el proceso mediante el cual las representaciones religiosas se encarnan en formas concretas. "Lo santo" es un libro teórico pero avalado por una rica praxis de vida.
En su epistemología, contrapondrá el “sentimiento” de Lutero a la inocua teología escolástica sobre el Espíritu. Lutero y no Erasmo fue su punto de referencia para la revaloración del sentimiento. Pocos hombres habrán experimentado con tanto estremecimiento como el Reformador el mysterium tremendum.
 

Schleiermacher, padre de la teología protestante del SXIX, insiste en la religión del corazón. El hombre posee un instinto sagrado, Dios es aprehendido en la inmediatez del sentimiento.
La publicación de “La filosofía de la religión de Kant y Fries y su aplicación a la teología” es un manual, antesala de Lo santo. Fries había encumbrado el término “barrunto romántico”. 

De forma similar, Otto buscará en la categoría de lo santo una especie de dato religioso originario que trascienda las concreciones empíricas de la religión y, en algun sentido, las explique. Es el apriori religioso al que O. acude, no sin admitir el carácter ambiguo del término.
 

Barth rechazará este término, ya que su admisión significaría que el ser humano tiene una estructura religiosa a priori, una exigencia de revelación, a la que Dios se vería obligado a responder.
Si tenemos en cuenta este término en su sentido kantiano, el conocimiento a priori es independiente de la experiencia. En lo santo lo interpreta de forma empírica, existencial y emocional. Lo numinoso brota de la base cognoscitiva del alma, “pero no antes de poseer datos y expriencias cósmicas y sensibles”, no nace de ellas, sino merced a ellas. Provoca una disposición latente del espíritu humano, una predisposición y propensión a la religión.
 

Otto cree posible un entendimiento entre diversas religiones.
Algunos de sus críticos tuvieron claro que su condición de teólogo está en el origen de las deficiencias que acusa su trabajo en el campo de la historia de las religiones debido a su etnocentrismo. Otto como su época defiende la superioridad del cristianismo sobre las demás religiones.
 

-Lo santo-
 

Desde el punto de vista histórico, el primero en destacar el concepto de lo santo fue Soderblöm. Reconoce en lo santo una mejor “varita mágica” que la idea de Dios para poner al descubierto lo común a toda religión. Insiste que es el criterio central para determinar la esencia de la religión. La distinción entre lo sagrado y lo profano.
 

Para Eliade, la originalidad de Otto reside en que en vez de estudiar las ideas de Dios y de la religión, analizaba las modalidades de la experiencia religiosa.
Otto se propuso estudiar lo racional y lo irracional en la idea de Dios, en donde lo irracional salió victorioso. Una religión racional es aquella que recurre al pensamiento, a la afirmación, al análisis y a la definición. Los elementos irracionales evitan que la religión se convierta en racionalismo; a su vez los elementos racionales preservan a la religión de caer en el fanatismo y la convierten en una religión culta, humana y de calidad.
 

Lo cierto es que en el primer capítulo ya introduce el concepto de “alboroto místico”. Lo santo es completamente innacesible a la comprensión por conceptos, es inefable. Desde la profanidad no hay acceso a lo peculiar de la religión.
La mística no es privativa del ámbito religioso. Dilthey denominó idealismo objetivo como un modo de ser contemplativo, estético, expectante, artístico. La categoría de “lo inefable” no es propiedad particular de nadie, tampoco de las religiones.
 

Cuando lo santo no se agota en su vertiente moral o racional, se convierte en lo numinoso. Ante lo numinoso emerge “el sentimiento de criatura”. Otto como Kierkegaard busca la distancia, la diferencia cualitativa, lo totalmente otro. Le parece qu Schleiermacher se ha quedado en lo subjetivo. El sentimiento de dependencia es un sentimiento de mí mismo, de mi dependencia. Otto n cambio cree que se refiere a un objeto fuera de mi.
La experiencia de lo numinoso se manifiesta como mysterium tremendum, misterio y sujeto religioso.


Fuente: "Dios, el mal y otros ensayos". Manuel Fraijó. Ed: Trotta

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