"Ningún hombre es capaz de atender a sus propias necesidades sin la ayuda de la sociedad. Estas necesidades, al actuar sobre cada individuo, impelen a la totalidad de ellos hacia la sociedad, de la misma manera que la fuerza de gravitación impele hacia un centro." Thomas Paine
Las sociedades que dan lugar al capitalismo industrial de mediados del SXIX son ya diferentes de aquellas que vieron nacer al liberalismo.
¿Cuáles fueron estas diferencias, que marcaron el tránsito al siglo XX?
El desarrollo de la industria, el fin del capitalismo individual y la creación de organizaciones económicas; la importancia de las instituciones bancarias y la aparición de grandes sociedades anónimas; los nuevos métodos de taylorización y mecanización, los nuevos problemas económicos, sociales y sanitarios; el desarrollo del capital monopolista y la ampliación de los sujetos de derechos políticos, partidos y sindicatos.
Con todas estas actividades se intensifica la participación del estado y comienza la crisis del liberalismo o solo de manera externa sino internamente, ya que surge la necesidad de unir las ideas liberales con la creciente demanda de organización social.
Si el liberalismo quería mantenerse como una fuerza viva capaz de transformar sus ideales en realidades, tenía que redefinir su teoría y prácticas políticas.
A mediados del SXIX, se pone en evidencia la creencia liberal de que el desarrollo económico solucionaría por sí mismo los problemas de miseria, analfabetismo y enfermedades.
Se defendió entonces, un amplio programa de reformas sociales que aspiraba a un nuevo orden social,que en palabras de Dewey, debería integrar y reconducir las actividades económicas privadas pero convirtiéndolas en instrumento al servicio del desarrollo de las capacidades de los individuos.
Este "liberalismo social" se caracterizó por alejarse de los presupuestos del liberalismo clásico y una mayor sensibilización hacia las desigualdades e injusticias que el desarrollo capitalista había generado.
Sus expresiones teóricas fueron desarrolladas por Stuart Mill, Hobhouse o Hobson; por Dewey, Keynes en entre guerras y por Rawls, Bobbio o Dworkin en nuestros días.
Esta revisión del liberalismo, también dio lugar a un nuevo liberalismo clásico, cuya principal característica es el rechazo de la creciente y expansiva regulación económica y asistencia social del estado.
Se quiso volver a un individualismo posesivo y a los principios básicos de la sociedad de mercado.
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